En la actualidad escuchamos un nivel excesivo de música, y en especial los jóvenes son los que escuchan estos niveles tan elevados de ruido. Aun cuando existen en cada dispositivo y reproductor de audio una advertencia que avisa del peligro de hacerlo, no se toma en cuenta y es por eso que se están registrando en los últimos años casos de desorden temporal, y más en los jóvenes.
Estos problemas de audición incrementa conforme pasa el tiempo, las locuciones y voces empezamos a escucharlas cada vez más diferentes. Y toda la población, en especial éste sector deberían de realizarse un chequeo mínimo de manera anual.
Las consecuencias aparte de la sordera temporal, el ruido excesivo puede generar confusión y dolores dentro de la cabeza. Además de confundir las letras h y s, escuchar murmullos y tener un zumbido constante en el oído, como si estuviera un micrófono conectado todo el tiempo, con pura interferencia.
Tratemos de usar audífonos grandes y modular el audio y la música, sabemos que nos gustan mucho las bandas o grupos ruidosos pero dejemos el volumen alto para los perifoneos o vendedores, no para nuestro uso diario del reproductor de música.
Les dejamos una canción de la oreja de Van Gogh, que podrán cantar al oído si comenzamos a cuidarnos de los ruidos excesivos.